En los últimos tiempos hemos asistido a una oleada de irracionalidad colectiva en la que hemos visto como se han llegado a vandalizar estatuas como la de Wiston Churchill, la de Cristóbal Colón (donde se llegó a derribar la estatua) o incluso con la estatua de Miguel de Cervantes en Estados Unidos.
Estos actos vandálicos se han venido dando a raíz del asesinato de George Floyd en EEUU, y es en este hecho en el que se intentan justificar y por el que intentar hacer una especie de ajuste de cuentas con el pasado.
Esta tendencia a tratar de mirar con la mentalidad actual los hechos acontecidos en el pasado es un ejercicio de tremenda irresponsabilidad por aquellos promotores de estas ideas, y lógicamente por quienes ponen en la práctica dichas ideas. Cada momento histórico está marcado por un contexto social que es indisociable a la mentalidad de dicho momento.
Acusar de racista a alguien como Churchill, Cristóbal Colón o Cervantes sin tener en cuenta el contexto histórico es una irresponsabilidad, porque de la misma manera podríamos hacer lo mismo con personajes como Karl Marx o Friedrich Engels, ya que en sus muchos escritos podemos encontrarnos con frases o ideas que hoy en día (y sin contextualizar) podríamos catalogar como racista, anti-semita y homófoba.
Karl Marx llegó a calificar al socialista Ferdinand Lassalle como:
Por otro lado, el anti-semitismo de Marx (a pesar de ser judío) también era palpable en su libro «Sobre la cuestión judía» en 1848.
¿Cuál es culto secular practicado por el judío? La usura.
¿Cuál es su dios secular? El dinero.
La quimérica nacionalidad del judío es la nacionalidad del mercader, del hombre de dinero en general.
Por su parte, Friedrich Engels mostraba su racismo para con los mexicanos en un artículo de 1849 que sería incluido en el libro de Marx y Engels titulado «Materiales para la historia de América Latina». En este artículo, dedicaba estas palabras a los mexicanos:
También si se quiere se puede ir más allá y catalogar a Marx o a Engels como a homófobos pues ambos tuvieron palabras poco afortunadas o directamente acusaciones muy graves contra otros miembros destacados de la política de la época.
Por un lado, Marx calificaba como «maricón estúpido» a von Schweitzer que fue detenido en el año 1862 acusado de homosexual, mientras que Engels iba mucho más allá y calificaba a Karl Ulrichs como «pederasta», Ulrichs que fue un defensor de los derechos homosexuales y un pionero del movimiento LGBT.
«Schwanzschwulen» se traduce como «maricón estúpido».
El «Uranismo» al que hace referencia Engels es un término desarrollado por Ulrichs y que hacía referencia a la homosexualidad, con la mentalidad de la época.
Con lo cual, si siguiéramos con esta especie de revisión también habría que incluir a personajes como Marx o Engels. Y si están «revisando» las estatuas de Colón, Churchill y Cervantes, también podrían hacerlo (bajo los mismos criterios) con las numerosas estatuas de Marx y Engels por todo el mundo.
Si en el año 2020 cabe llamar a Churchill, Colón o Cervantes como racistas, también hay que llamar a Karl Marx y a Engels como racistas, anti-semita y homófobos. Quienes practican esta revisión deben hacer una revisión completa y no sólo parcial.
2 respuestas a “Marx y Engels también eran racistas.”
[…] a través de Marx y Engels también eran racistas. — Miguel Puga – Blog personal […]
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Completamente de acuerdo. Tenemos que ver los fenomenos sociales en su contexto, en EEUU el exacerbo de la extrema derecha incitada por el actual presidente, ha resucitado a la trasnochada estupidez de la extrema izquierda. Sectores oportunistas que terminan por confundir a los ciudadanos. Si bien es cierto que existe una polarizacion entre Republicanos y Democratas, no se trata de «sectarismo» como algunos opinan. Los valores tradicionales del pueblo estadounidense estan por encima de esos conspiradores extremistas.
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